Anterior   Siguiente

Después de darle muchas vueltas al asunto, al día 8 de la partida de Isaías, Carlos tomó la determinación de abandonar ese sueño de ser militar que estaba construyendo con tanto esfuerzo pero que había llegado a la conclusión de que había sido en vano. Se sentó en el borde de la cama y empezó a alistar su equipo de campaña con todos sus implementos para emprender un viaje sin retorno.


Comentarios